Nueva York, Estados Unidos
La diseñadora británica Victoria Beckham presentó el domingo, con motivo de la Semana de la Moda de Nueva York, una colección llena de madurez, marcada por un trabajo sofisticado en los cortes y materiales.
La excantante demostró hace tiempo que su presencia en el mundo de la moda es legítima y que su inversión en esta nueva actividad era real.
Y luego de varias temporadas, ella supera cada vez un poco más el estilo clásico que había mostrado en sus primeros pasos en el mundo de los desfiles de moda, en 2008.
Para la temporada primavera/verano 2017, se atrevió con osados cortes y costuras que se presentaron este domingo en Nueva York ante la mirada de su marido, el astro del fútbol David Beckham, y su hijo Brooklyn, junto a Anna Wintour, la editora en jefe de la revista Vogue.
Principalmente mostró un sostén de terciopelo naranja flúor que se combina con una falda recta y un bolso al hombro, ambos en color naranja.
Victoria Beckham hizo así, de paso, una apuesta por un material tradicionalmente reservado a las estaciones frías.
'Normalmente es pesado, invernal, pero este es verdaderamente ligero, cremoso y la sensación es agradable para la piel', explicó después del desfile la creadora sobre su recurso al terciopelo.
La diseñadora también presentó un trabajo con los escotes y la asimetría, principalmente con un vestido naranja que se abre a un costado sobre un sostén con el lazo al otro costado, como si se le hubiera cortado la parte superior.
Naranja, lila, verde menta..., Victoria Beckham también integró colores que contrastan, otra libertad que parece tomarse.
'Tengo verdaderamente la impresión de haber alcanzado la plenitud esta temporada', comentó, radiante, la diseñadora.
'Hay mucho desarrollo de materiales, de cosas interesantes sobre las que nosotros trabajamos', añadió.
Esta colección rica y diversa 'no está inspirada en nadie', dijo, 'aparte de las necesidades de mis clientas'. 'Ellas desean que yo me mantenga fiel a mí misma cada estación'.
Para conocer mejor a sus clientas, Victoria Beckham dijo que se sirve también de las devoluciones que provienen de sus dos tiendas, en Londres y Hong Kong.
Por azar, el desfile del domingo se desarrolló en Nueva York precisamente 15 años después de los atentados del 11 de septiembre.
En homenaje a las víctimas, se guardó en dos ocasiones un minuto de silencio, a las horas precisas en que se desplomaron las Torres Gemelas en 2001.
Anna Wintour, David y Brooklyn Beckham se levantaron en el segundo minuto de silencio y fueron los únicos que se mantuvieron de pie en la inmensa sala situada a unos centenares de metros del World Trade Center.
La diseñadora británica Victoria Beckham presentó el domingo, con motivo de la Semana de la Moda de Nueva York, una colección llena de madurez, marcada por un trabajo sofisticado en los cortes y materiales.
La excantante demostró hace tiempo que su presencia en el mundo de la moda es legítima y que su inversión en esta nueva actividad era real.
Y luego de varias temporadas, ella supera cada vez un poco más el estilo clásico que había mostrado en sus primeros pasos en el mundo de los desfiles de moda, en 2008.
Para la temporada primavera/verano 2017, se atrevió con osados cortes y costuras que se presentaron este domingo en Nueva York ante la mirada de su marido, el astro del fútbol David Beckham, y su hijo Brooklyn, junto a Anna Wintour, la editora en jefe de la revista Vogue.
Principalmente mostró un sostén de terciopelo naranja flúor que se combina con una falda recta y un bolso al hombro, ambos en color naranja.
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Naranja, lila, verde menta..., Victoria Beckham también integró colores que contrastan, otra libertad que parece tomarse.
Victoria Beckham hizo así, de paso, una apuesta por un material tradicionalmente reservado a las estaciones frías.
'Normalmente es pesado, invernal, pero este es verdaderamente ligero, cremoso y la sensación es agradable para la piel', explicó después del desfile la creadora sobre su recurso al terciopelo.
La diseñadora también presentó un trabajo con los escotes y la asimetría, principalmente con un vestido naranja que se abre a un costado sobre un sostén con el lazo al otro costado, como si se le hubiera cortado la parte superior.
Naranja, lila, verde menta..., Victoria Beckham también integró colores que contrastan, otra libertad que parece tomarse.
'Tengo verdaderamente la impresión de haber alcanzado la plenitud esta temporada', comentó, radiante, la diseñadora.
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Anna Wintour, David y Brooklyn Beckham se levantaron en el segundo minuto de silencio y fueron los únicos que se mantuvieron de pie en homenaje a las víctimas de los atentados de las Torres Gemelas en 2001.
Esta colección rica y diversa 'no está inspirada en nadie', dijo, 'aparte de las necesidades de mis clientas'. 'Ellas desean que yo me mantenga fiel a mí misma cada estación'.
Para conocer mejor a sus clientas, Victoria Beckham dijo que se sirve también de las devoluciones que provienen de sus dos tiendas, en Londres y Hong Kong.
Por azar, el desfile del domingo se desarrolló en Nueva York precisamente 15 años después de los atentados del 11 de septiembre.
En homenaje a las víctimas, se guardó en dos ocasiones un minuto de silencio, a las horas precisas en que se desplomaron las Torres Gemelas en 2001.
Anna Wintour, David y Brooklyn Beckham se levantaron en el segundo minuto de silencio y fueron los únicos que se mantuvieron de pie en la inmensa sala situada a unos centenares de metros del World Trade Center.
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